¡Saludos querido lector! Es un placer tenerte de nuevo en este espacio en donde compartiremos nuestra pasión por el café.
Desde hace mucho tiempo se ha relacionado la manera en la que pedimos nuestro café con nuestra personalidad, ¿Será esto posible? ¿A caso podrán descifrar nuestras tendencias y comportamiento por el simple hecho de preferir un americano a un capuccino?
El café es una bebida obligada, es el elixir de combate que nos prepara para un nuevo día, si bien hay personas que realmente no gustan del magnífico sabor de una taza de expresso triple hiper cargado, si necesitan del estímulo de la cafeína por mínimo que este sea para sentirse listos ante un nuevo día, por fortuna para ellos, existe una gran variedad de mezclas y tipos de café que permiten también que este estudio sea posible.
El estudio es muy simple y no revela mucho sobre la complejidad de una persona, pero sí puede darte una pauta para saber si aquel personaje del café que tanto te llamó la atención es compatible con tu personalidad, (aunque siempre es mejor acercarse y conocerlo) sin más comenzamos este recorrido por los tipos de café y su relación con la personalidad de los bebedores.
Se cree que quienes preferimos una taza de café americano, sin importar la intensidad, somo personas simples, con gusto al detalle, con un grado alto de concentración y firmeza para terminar cualquier tarea que se tenga pensada realizar.
Como no todo es perfecto hay un lado negativo, a los que nos gusta esta bebida se nos relaciona con un mal carácter, con un trato brusco y distante al igual que una resistencia a los cambios de último momento (a mi en los particular me tiene contenta con unas cuantas tazas al día de un excelente americano bien cargado y sin azucar porfavor)
Los bebedores de café latte son personas que gustan de suavizar la amargura de la vida, al igual que suavizan con un poco de leche y azúcar el café de cada mañana, son personas sumamente sociables y buscan agradar a los demás.
Son personas muy generosas que aman ayudar al prójimo, aunque también tienen su detallito; los amantes del latte tienden a demorar mucho en sus actividades y a dejar de lado sus necesidades por estar pensando en ayudar a los demás (todos unos terroncitos de azúcar)
Los bebedores de café descafeinado ( ¿De verdad? Mejor tomen un tecito) son relacionados con una personalidad perfeccionista y obsesiva, especialmente con su salud, gustan de tener todo en perfecto orden y son muy entregados en todas las tareas a realizar, su lado negativo (además de excluir la cafeína) es que tienden a caer en roles de prepotencia por el afán de controlar cada detalle en la vida.
Los que prefieren las bebidas a base de café, esos batidos que más que nada son malteadas, son relacionados con una personalidad espontánea, creativa y audaz, aunque tienden a tomar decisiones que ponen en riesgo su salud, suelen ser imprudentes y preferir una solución rápida a un análisis de la situación.
¿Tu como prefieres tu café? ¿Te has identificado con este estudio?
¡Hasta la próxima!
Fuentes:
http://www.directoalpaladar.com
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